Muy orgollosos de no estar comprados por la Junta de Andalucía.
Ver otros medios de comunicación en Almería en los que los tentaculos de la Junta tutelan lo que se puede o no publicar.
 

martes, 12 de junio de 2007

ALMERÍA NECESITA TENER VOZ PROPIA

ALMERÍA NECESITA TENER VOZ PROPIA

Todo almeriense ha escuchado alguna vez que la comunidad de la que forma parte se ha hecho a sí misma. No se trata de la comunidad autónoma sino de la comunidad almeriense. Es aquella que en su amplia historia ha pasado por algunos momentos de esplendor pero en la mayoría de las ocasiones ha sufrido la miseria en la carne de sus habitantes. Aquella que cuando ha tenido capacidad de decisión sobre la manera de atajar los problemas que afectaban a la comunidad en su conjunto ha vivido sus mejores momentos, aquella que cuando estas decisiones han sido tomadas en lugares ajenos a nuestro entorno se ha producido un estancamiento en el progreso de sus habitantes por no haber sabido darles solución o más frecuentemente por haberlos abandonado a su suerte; porque no nos engañemos, desde que formamos parte del actual Estado de España e incluso un poco antes la nota dominante ha sido la posición marginal de nuestra pequeña región en el ámbito estatal y la escasa presencia de éste en cuanto a su capacidadde actuación.

Normalmente la Historia de España está marcada por el carácter centralista de su Gobierno,a pesar de haberse formado el país de la unión o adhesión dediferentes territorios anteriormente constituidos en reinos. Esta contradicción unida a la tradicional mala gestión desembocó en el nacimiento de los nacionalismos, corrientes de pensamiento que consideran que es conveniente atribuirse las competencias propias de un Estado para ser asumidas por un gobierno propio, con la convicción de que su desempeño será más eficaz que el que pudiera llevar acabo el Gobierno Matriz. Una excluyente interpretación del nacionalismo aboga por enajenar al Estado de sus funciones dentro del territorio considerado, negando incluso la fraternidad con sus conciudadanos de otras regiones. Para ello se han valido hasta de cuestiones identitarias, a pesar de que ello supone entrar en el ámbito de las opciones personales del individuo. Lo que sí es cierto es que cuanto más centralista e ineficazmente se gestionaba el Gobiernode la Nación con mayor fuerza emergía el nacionalismo posteriormente.

Llegados a este punto tuvo lugar la última transición de Gobierno hace tres décadas, y se optó por descentralizar el estado y dotar a sus regiones de la capacidad para gobernar los asuntos que sólo a ellos les compete,al menos ésa era la idea. El problema surgió en cuanto se concedió un estatus preferencial a ciertos territorios concretos en base a una supuesta identidad propia que ostentaban y que las corrientes nacionalistas se habían encargado de poner de manifiesto.

Era previsible que ocurriera y de hecho ocurrió que alguna que otra región se sintiera agraviada por el trato asimétrico y preferencial hacia determinadas regiones; ése fue el caso de Andalucía, región que tendió a imitar las ideologías nacionalistas para aplicarlas en el territorio que supuestamente se consideraba como tal. La Constitución vigente admite que una determinada región pueda considerarse “nacionalidad histórica” y Andalucía terminó siendo consultada mediante referéndum sobre si quería iniciar el procedimiento para obtener la autonomía de igual rango que las consiguieron aquellas llamadas “históricas”, es decir mediante el artículo 151 de la constitución, que venía asignificar que se proclamaba igualmente nacionalidad histórica. Para conseguirlo, sus ciudadanos en mayoría en cuanto al censo total debían votar afirmativamente de manera explícita; la ley sobre referendums en aquel entonces obligaba el posicionamiento explícito a favor de lo refrendado para que fuese otorgado y era de público conocimiento antes de celebrarse la consulta. De hecho el partido que ocupaba el Gobierno Estatal entonces, la U.C.D. ,impulsó la abstención puesto que no era de su interés que el resultado fuera positivo.

Sin embargo el referéndum resultó positivo salvo para el caso de Almería, provincia donde se produjo el menor porcentaje de SÍes, insuficiente a todas luces para que prosperase la consulta, y uno de los mayores porcentajes de abstención y de NOes. Como el resultado de Almería podía echar a perder el resultado global del referéndum se decidió por parte de los políticos en primer lugar cambiar la ley sobre referéndums concarácter de retroactividad para modificar el resultado de la consulta a través de la Ley Orgánica 12/80, y en segundo lugar otorgar a los diputados provinciales la potestad para decidir si se incorporaban a la iniciativa autonómica andaluza, esto a través de la Ley Orgánica13/80, obviando el posicionamiento de los almerienses en el referéndum.

Esta conducta resultó claramente antidemocrática, en primer lugar porque el referéndum dio un resultado concreto pese a que se interpretómaliciosamente arguyendo deficiencias en el censo que curiosamente nidos años antes se pronunció a todas luces favorable a la Constituciónde 1978 y no teniendo encuenta una abstención en parte promovida por un partido político de peso. En segundo lugar, no es democrático sustituir el posicionamiento directo de la población por el de sus supuestos representantes, que terminaron decantándose por la opción que sus respectivos partidos políticos le encomendaron, movidos por el interésde aquellas provincias en que el referéndum resultó positivo, y sin tener en cuenta otras alternativas perfectamente legales para Almería y más fieles al resultado del referéndum, como es la propia autonomía.

Porque aunque parezca imposible, no lo es. En el momento de establecerse la distribución en Comunidades Autónomas, ya fueran consideradas con un status especial o sin él, un determinado número de Diputaciones decidieron constituirse en Comunidades Autónomas por sí mismas y en solitario, sin ser consideradas comunidades con identidad o entidad histórica, simplemente porrazones operativas. Ahí están los casos de la provincia de Santander, que pasó a ser la Comunidad autónoma de Cantabria o la de Logroño, que pasó a ser La Rioja, ambas con una población del mismo orden de magnitud que la provincia de Almería, pero cuyos representantes electos consideraron que lo más conveniente para su futuro era establecer el centro de las decisiones que sobre ellas hubiera que tomar dentro de sus límites provinciales, dado que cualquier otra alternativa suponía ceder esa capacidad de decisión a territorios ajenos a su realidad cotidiana. Otro caso es el de lascomunidades autónomas de Murcia y Madrid, cuya diferencia notoria en población respecto de sus provincias vecinas influyó en la conveniencia de constituirse en Comunidades Autónomas para evitar el agravio hacia esos territorios relativamente despoblados de su entorno o marco geográfico.

El caso de Almería, dejando a un lado los acontecimientos posteriores al referéndum del 28-F-1980 aunque en el fondo ligado a sus antecedentes,transcurrió por cauces distintos: A diferencia de los casos cántabro y riojano, la situación estaba impregnada de cuestiones identitarias, de si formábamos parte de un pueblo común, unido y diferenciado del resto. En el caso de Almería suponía la aceptación de que teníamos más en común con la idiosincrasia bajo andaluza que connuestros vecinos murcianos, un argumento totalmente alejado de la realidad histórica del sureste peninsular, a pesar de que desde que formamos parte de la actual España o de uno de sus Reinos antecesores,el de Castilla, lo que hoy es la provincia de Almería ha estado ligada al llamado Reino de Granada, lo cual no quiere decir que a pesar de esa vinculación formal, en la realidad no haya existido una diferenciación entre ambos lados de la barreras geográficas que nos separan, fruto del aislamiento entendido como escasez en cuanto a comunicación mutua, ni que esos vínculos supongan que los intereses de Almería como Región estén supeditados a los intereses de las restantes provincias formadas a partir del Reino de Granada, que viene asignificar que el devenir de la provincia de Almería no depende de la decisión tomada por las provincias citadas sobre renunciar a su diferenciación históricar especto de la Baja Andalucía para unirse a ella o no. Por otra parte,tiene en común con los casos citados su lejanía del que estaba llamado a ser centro de decisión de la Comunidad Autónoma, no ya lejanía geográfica sino lejanía entendida como territorios que se han desenvuelto de maneras lo suficientemente distintas como para considerarse regiones ajenas unas a otras y por tanto incapaces de entender los problemas a los que se enfrenta cada una de ellas,que también son en gran parte distintos. Además de su condición periférica respecto del resto de provincias de la comunidad autónoma de Andalucía, destaca la diferencia poblacional respecto a las mismas, en ocasiones bastante mayor que Almería, lo que unido a su mayor proximidad al centro de decisión repercute en ventajas de las que la provincia de Almería no se puede beneficiar, estableciéndose así de principio un agravio no intencionado ni subsanable mediante políticas compensatorias, pero que no deja de suponer un lastre para el pleno desarrollo de la provincia. En definitiva, la conclusión es que Andalucía no tiene capacidad para representar a Almería.

Para agravar la situación, la implantación del llamado “Estado de las autonomías” no ha supuesto una descentralización de competencias, como era su objetivo, sino una re-centralización, que significa que a pesarde haberse transferido determinadas competencias no se ha extinguido el modo centralista de aplicarlas. Simplemente se han traspasado competencias sin delegar en la mayoría de los casos a instituciones de rango inferior, produciéndose la acumulación de poder bajo un mismo órgano gubernamental, cuya acción o estrategia se ejerce de manera totalmente centralista. Puede comprenderse que esta situación es funesta para un territorio considerado periférico o marginal (que no marginado) como Almería, alejado en todos los sentidos del centro de decisiones y sin una voz que atienda a sus intereses; resulta evidente que si el peso dentro de una misma comunidad autónoma es marginal, en el marco estatal la relevancia de Almería es insignificante.

Una solución a esos problemas es la constitución de Almería en Comunidad Autónoma, dejando a un lado cuestiones identitarias, que entran en el plano de lo personal, es deseable que Almería se haga relevante en el ámbito nacional, que sea capaz de tomar sus propias decisiones y de gestionarse autónomamente en los asuntos que no sean estrictos del marco estatal del que forma parte.

Hay quienes se posicionan en contra con los siguientes argumentos:

- Almería no tiene entidad suficiente para formar una comunidad autónoma: Actualmente la población de Almería se sitúa en unos 630.000 habitantes, población suficiente para contar con unos fondos que permitan asumirlas competencias propias de una comunidad autónoma.

- Almería por sí solano dispondría de dinero suficiente para gestionarse:
El balance en 27 años de autonomía es desfavorable en cuanto a fondos aportados-fondos recibidos; esto no es una afirmación gratuita sino que ha sido reflejado en diferentes medios de comunicación, así que es de público conocimiento.

- Una autonomía propia supondría un gasto institucional mayor. Los políticos de Almería son incapaces de gobernar con responsabilidad:
La diferencia entre formar parte de una comunidad autónoma y ser una comunidad autónoma radica en que la presencia de la comunidad autónoma pasa de ser una delegación del gobierno nombrada a dedo por los cargos ejecutivos electos a ser cargos ejecutivos electos, con lo cual además la representatividad de la ciudadanía es mayor. Respecto a la capacidad de los políticos, las candidaturas a formar parte de un régimen de gobierno con responsabilidades son mayores en número y por tanto la competencia es mayor que a ser subordinado y por tanto limitado en capacidad de acción. Esto repercute irremediablemente en la calidad política de los candidatos a formar gobierno.

- Históricamente Almería no ha gobernado autónomamente:
Durante la pertenencia al Reino de España o a su precursor el Reino de Castilla el modelo de gobierno ha sido centralista, ni siquiera Andalucía salvo en esta última etapa democrática en que nos encontramos lo ha sido. Sin os remontamos a épocas anteriores esa afirmación falta a la verdad, Almería fue durante 75 años un Reino independiente al igual que muchas otras Taifas y además coincidió con una época de esplendor para supoblación. Además dos siglos antes aunque por pocos años se constituyó la República Marina Independiente de Bayyana. De todas maneras, en cuanto a acción de Gobierno ningún acontecimiento pasado limitala posibilidad de gestionar adecuadamente en el futuro. Cualquier comparación del pasado con el posible futuro resulta anacrónica.

- Almería necesita a Andalucía para ser conocida en el exterior:
Almeríaya es conocida en el exterior y no por su pertenencia a Andalucía.Tanto históricamente como actualmente Almería es conocida por sus gentes y por lo que ellas pueden producir; amén de que cuando alguien oye Andalucía no es la imagen de Almería precisamente la que viene a la cabeza, lo cual es otra razón para que se distinga.

- El desarrollo de Almería se debe a su pertenencia a Andalucía:
Débil argumento que es incapaz de explicar por qué en menos de 27 años de autonomía Almería se ha desarrollado para pasar de los más bajos índices de bienestar a los más altos, muy por encima de la media andaluza (Andalucía no escapaz de provocar un progreso para una parte en concreto de su territorio que para el total del mismo no pued ealcanzar, aunque fuera verdad resultaría contradictorio). Además, los acontecimientos que han provocado la evolución positiva de Almería no tienen su origen en absoluto en Andalucía aunque la afecten igualmente:Tránsito de Régimen Dictatorial intervensionista a uno democrático más liberal, respaldo de la OTAN en cuanto a seguridad de sus fronteras, entrada en la C.E.E. , ahora Unión Europea y posterior apertura de fronteras y libre comercio en la misma y mejora de la comunicación con el corredor Mediterráneo (primero por carretera y aún pendiente mediante ferrocarril) entre otros.

- Es insolidario querer escindirse de la comunidad autónoma sólo por no recibir todo lo que se aporta: La posibilidad de Almería constituirse en comunidada utónoma no repercute en las competencias y obligaciones del Estado, entre ellas el deber de cohesionar su territorio y aplicar el principio de solidaridadentre regiones. El regionalismo aboga por tener voz propia y peso específico en el Estado, no en suplantarlo.

Así pues, independientemente del sentimiento de pertenencia de la gente cabe que se cuestione en lo siguiente:

¿Prefieren la constitución de una propia comunidad autónoma o prefieren seguir como estamos?

¿Prefieren asumir competencias propias de una comunidad autónoma y gestionarlas directamente o prefieren que las gestionen otros en vez de nosotros mismos?

¿Prefieren elegir a la máxima representación autonómica en nuestra Región o prefieren que sea impuesta desde otro lado por medio de delegaciones de gobierno?

¿Prefieren que los problemas regionales propios sean abordados desde una cámara de representantes propia o que se aborden desde una perspectiva ajena como hasta ahora?

Está demostrado que una Región de 630.000 habitantes es capaz de gestionarse autónomamente. Siendo conscientes de la necesidad de solidaridad entre territorios para evitar desigualdades ¿prefieren la solidaridad interregional sin mostrar ninguna preferencia concreta sino simplemente pensando en la cohesión global del Estado o prefieren que exista preferencia de unos territorios sobre otros y además no exista elecciónsino que sea algo obligado?

En definitiva, ¿prefieren descentralización o re-centralización?

Si convienen en que la situación de Almería no es la deseable y que lo más adecuado sería la gestión autónoma de Almería, el primer paso es hacerlo constar.

Escrito por F.I.E.R.A el 04/02/2007 13:37

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Es sorprendente que hayan pasado más de tres años sin comentar este artículo.

Amigo tienes toda la razón: comunidad autónoma de Almería, Región de Almería, cámara de representantes propia, gobierno propio atento a nuestras necesidades sin delegaciones de gobiernos vecinos, solidaridad a través del gobierno de España. Almería y los almerienses somos capaces y autosuficientes: debemos tener voz propia para defender nuestros intereses.

Muy bueno tu análisis y la manera de dejar claro que nada nos lo impide salvo la propia existencia de la Junta de Andalucía.

Te animo a profundizar aún más y a abrirnos los ojos hasta que seamos capaces de decir lo que tu dices sin miedo y sin complejos. Ese día algo habrá cambiado, pero tu propio artículo ya es una semilla para alcanzar este objetivo.

PODER ALMERIENSE Y COMUNIDAD DE ALMERÍA YA.

Anónimo dijo...

NO OS QUEREMOS MURCIANICOS.VIVA ANDALUCIA LA VERDADERA SEVILLA,JAEN,CORDOBA´,MALAGA,CADIZ,CEUTA,MELILLA.,HUELVA,SUR DE BADAJOZ.

Almeriensico dijo...

Pero bueno ¡ hay que ver como están los hijos de Blas!

Cierto: Almería no es Andalucía y, por lo tanto, no forma parte ni de la Andalucía verdadera ni de la Andalucía falsa.

Sentada esta cuestión: si el precio que tenemos que pagar para poder ser almerienses es que no nos queráis, no hay problema. No nos queráis, pero haced el favor de permitirnos marchar.

Por lo demás, si vuestra Nasión o Imperio reivindica Badajoz sur, o Ceuta o Melilla, ...Adelante, si se sienten andaluses que se vayan con vosotros...A mi, personalmente, me importa un pepino que reivindiquéis El Sahara, el Reino de Marruecos, la luna, Marte o cualquier otro punto del Universo.

Pero a Almería ni me la toquéis ni la recordéis: total para robarnos estamos mejor solicos.

ALMERÍA: la levantina.

Anónimo dijo...

VIVA ANDALUCIA LIBRE ALMERIA NO EXISTE PATETICOS MURCIANICOS

Anónimo dijo...

ANDALUCÍA ES ABORRECIBLE Y LOS ANDALUCES SOIS DETESTABLES.

ALMERÍA EXISTE Y MURCIA TAMBIÉN. ALMERIENSES Y MURCIANOS SOMOS BUENA GENTE.

NO SE PUEDE DECIR LO MISMO DE VOSOTROS, ANDALUCES.

Anónimo dijo...

ALMERÍA NECESITA TENER VOZ PROPIA y no la tendrá si no se constituye en Comunidad Autónoma uniprovincial. No podemos depender de un gobierno andaluz forastero que no piensa en nosotros y que no nos representa. No necesitamos interlocutores, PODEMOS SOLOS. NADIE NOS REPRESENTARÁ MEJOR QUE NOSOTROS MISMOS.

ALMERÍA ALMERIENSE Y PARA LOS ALMERIENSES: somos almerienses todos los que vivimos y trabajamos en Almería y todos los que sentimos en clave almeriense. No importa donde hayan nacido: los que sienten así son almerienses.

PODER ALMERIENSE Y COMUNIDAD AUTÓNOMA DE ALMERÍA YA.

Anónimo dijo...

¿Os dáis cuenta de que, finalmente, hemos sido nosotros los que hemos tenido que reivindicar el AVE a Almería? ¿ Os dáis cuenta que en la ordenación del área metropolitana también hemos tenido que ser los almerienses los que hemos puesto las cosas en marcha? Lo mismo ha sucedido con alguna linea de vuelos se ha abierto en el aeropuerto, con el soterramiento, con todos esos proyectos que se están anunciando antes de las elecciones municipales de mayo.

ASEMPAL, CÁMARA DE COMERCIO, ASOCIACIONES DE VECINOS, MESA DE INFRAESTRUCTURAS, SINDICATOS... FINALMENTE, ALGÚN POLÍTICO.

Estos son los que nos representan, los que constituyen y tienen la voz propia de Almería.

Si nos lo tenemos que ganar todo nosotros, nuestra sociedad civil, ¿ Para que queremos gobiernos que solo se acuerdan de nosotros por presiones y antes de una contienda electoral?

Nuestra voz somos nosotros mismos: la voz de almería somos nosotros y no los gobiernos que dicen representar nuestros intereses.

PODER ALMERIENSE YA: tnemos que seguir reivindicando todo lo que nos merecemos, incluído nuestro derecho a constituirnos en Comunidad autónoma uniprovincial.

¿Dependencia en tiempos de crisis? dijo...

Estos días me hago una pregunta: ¿ Cómo se hubiese solucionado la crisis del sector hortofrutícola si, como comunidad autónoma uniprovincial, hubiésemos tenido voz propia?

Seguramente, nuestro gobierno hubiera tenido un conocimiento más profundo de lo que nos estamos jugando.

Otra pregunta, dada nuestra fuerte dependencia del sector hortofrutícola:¿ Deberíamos de disponer de infraestructuras para salir rápidamente en defensa de nuestra economía? SÍ, ¿VERDAD? ¿Por qué los análisis de nuestros productos no se pueden efectuar en laboratorios almerienses avanzados y preparados para este tipo de alertas o amenazas?

Nos jugamos mucho para depender de otros.

pokeralmeria dijo...

http://www.almeriaesregion.com/%c2%bfquienes_somos_.ws
Este es mi mejor comentario

Ánimos y felicitaciones dijo...

No me cabe la menor duda, ese es tu mejor comentario:"www.almeriaesregion.com".

Tampoco me cabe la menor duda de que Almería merece ser Región.

Región de Almería dijo...

Sin REGIÓN AUTÓNOMA, jamás tendremos voz propia y otros - los junteros sevillano andaluces - decirán por nosotros. Defienden y defenderán sus intereses jamás los nuestros.

Almería es una Región y necesitamos que se reconozca nuestro hecho regional, accediendo a la autonomía que nos negaron el 28-F de 1980.


ALMERÍA REGIÓN AUTÓNOMA YA.

Queremos pedir disculpas si alguien se siente molesto por la publicidad de este blog. Queremos que comprendais que No estamos subvencionados por la Junta de Andalucía, como ocurre con el resto de medios de comumicación de la la provincía. Estos enlaces publicitarios es una pequeña gran ayuda para poder continuar con la labor de este humilde blog regionalista almereriese.